JAZZ DANCE
Escuchaste hablar de Chicago? La novicia Rebelde? I´m singin in the rain? O alguna vez viste por la tele So you think you can dance? o Bailando con las estrellas o el mismo Bailando por un sueño?
Si alguna vez soñaste con todo esto y te dieron ganas de imitar o de hacer algo parecido, vas por buen camino!
La danza jazz te otorga la técnica necesaria para tu cuerpo y permite bailar cualquier tipo de música. Video clips, shows en discos, televisión, espectáculos en teatro y desfiles son algunos de los espacios donde se utiliza la danza jazz como expresión.
En los musicales de Broadway, Londres y de la misma calle Corrientes los bailarines se entrenan principalmente en Jazz. De aquí se desprende el “Theater Dance”, un estilo de clase donde se manejan los códigos del musical y las herramientas del jazz.
Esta disciplina de la danza es una constante evolución y emocionante forma de baile lleno de ritmo, síncopa, pasión y vida. El Jazz puede ser potente y percusivo o expresivo y lírico. Utilizando como base elementos propios de la danza clásica y moderna, en las clases de jazz se busca explorar aislamientos del cuerpo con movimientos de la cabeza, hombros, costillas, pies y brazos. Proviene originalmente de los Estados Unidos y está influenciado por los estilos musicales de cada década subsiguiente
JAZZ LYRICAL
El Jazz Lyrical es un estilo que nace de la fusión del ballet clásico con el jazz y el contemporáneo. Es expresivo, sutil y dinámico, centrado en transmitir musicalidad y emoción a través del movimiento.
Combina secuencias y pasos complejos técnicamente, con caminatas simples y naturales. La música puede ser de cualquier género, el pop, rock, e incluso el hip hop son populares para la este tipo de coreografías. Es típico del estilo el uso de la mezcla de la voz cantada con importantes porciones de música instrumental con una fuerte carga de sentimientos. El Jazz Lyrical inspira a coreógrafos y bailarines a utilizar la danza para interpretar la música expresando emociones. Una coreografía de Jazz lyrical se caracteriza por interpretar la esencia de cada canción destacando la belleza, elongación, técnica y fuerza de quien lo baila. Las mismas se basan en sentimientos y emociones y, aunque la técnica es fundamental, el espíritu general dice que debe pasar desapercibida y la danza debe fluir de un movimiento a otro sin fin.
Debido a su demanda de un nivel intermedio o avanzado de destreza técnica y la importancia del enfoque emocional, este estilo es muy popular sobre todo con los bailarines apasionados que desean combinar la técnica con la musicalidad.